siete velos sobre tu cara de princesa rusa
no pude ver quien golpeaba tu puerta
naturalmente, no era yo
tus ojos miraban mi corazón
extrañada por toda esta historia
absolutamente aterrado abrí la boca desmesuradamente
tratando de entender quien es esto
¿dónde comprar un cigarrillo que dure toda la vida?
donde fumarlo, queda poco tiempo para que empiece el partido
todos entramos sin problemas, esperamos
mostrás tus piernas lo mejor que sabés hacerlo
tus ojos miraban mi corazón
y a nadie más, porque le dabas la espalda al mundo
que sobriedad, ese lunar en tu blanca espalda desnuda
claro
tu voz no era tu voz, era la voz de la noche
queda algo por hacer siempre, esa es la vida
cada minuto malgastado vale por igual
y nadie puede negarlo, ni cambiarlo, ni evitarlo
la voz de la conciencia no existe, ¿o sos vos? No se.
tus dedos conocen mi cuerpo, mejor que yo y que vos
pero, creo que esta noche no importa
el recuerdo no repara en sutilezas, es recuerdo
se hace tarde y no encuentro esa calle que siempre busco
en la esquina hay alguien parado, lo conozco y se que quiere
verme sangrar, y sangro.
Tu lunar me sonríe y está todo casi bien
tus ojos seguían mirando mi corazón, o mejor dicho:
el hueco donde estaba.